viernes, 29 de mayo de 2020

MAEÑA AUTÉNTICA BIRILA ESPINAL


Ana Birila Espinal
       Llegó de Clavijo a Mao con un serón cargado de sueños.
     Ella es inspiración, madre abnegada, trabajadora incansable y buena vecina, tiene 32 años  viviendo en la calle Colón de los cajuiles.
   El trabajo su estilo de vida, una mujer de fe que llaman  “La abuela del templo” en su congregación.
Es una MAEÑA AUTÉNTICA hija de Dios con espíritu vivo de que cuando se quiere se puede.


martes, 12 de mayo de 2020

El virus de la tierra, está en la celda.


El virus de la tierra,  está en la celda.
    La transparencia de las  aguas de los mares lucen los colores de sus especies  bailando  en el  fondo libre.   
                       
   Los animales caminan y descansan en las calles y avenidas del pueblo.
    Las aves cantan a todo pulmón en las madrugadas, callando la ciudad  de las  bocinas y limpiando  el pestilente olor a gasolina. 

La vida silvestre  viste su mejor gala, si,  está de fiesta, la dejamos respirar.
  Las  golondrinas en manadas  acuartelaron con su armónico canto  el virus del planeta tierra, LA HUMANIDAD.

  La naturaleza  susurra su alegría, al apagar  las Chimeneas Industriales  y encerrar el virus  en las celdas con muros de miedos.

  En el campo  se  han vuelto a escuchan  las cotorras  hablar su idioma, el barancoli silba y enamora, la sigua palmera juega con el viento y el gavilán ha vuelto a volar  encimas de las olas.

   Ahora, mientras el  planeta no huele a huevos podridos, las aves hacen sus viajes migratorias, con sus gestos y hermosos  plumajes pintando el cielo de arcoíris, mientras el hombre duerme boca abajo. 
 
   El virus humano esta enjaulado de rodillas, la guerra silente nos ha dejado como enanos del mundo, y Dios  nos vuelve a regalar otra oportunidad para que  aprendamos amar la madre tierra. Doris Rodríguez.


Quédate en casa.Voz Doris Rodriguez


    Aún estamos de cuarentena, sin saber cuándo  vamos  a salir.
   Lo que  sí debemos comprender ahora es, que no somos dueños del tiempo, que se quedaron atrás las metas y objetivos  en la fecha que nos habíamos planteado para este año 2020.
   Dios nos ha puesto de rodillas  ante ÉL, para que entendamos que la vida en cristo Jesús  es más importante que nuestra agenda, el carro, la casa, la empresa, el trabajo, el dinero y todo lo que nosotros creemos “importante”…
   No entendemos que lo único para contrarrestar este virus es, quedarnos en casa.
    Sé que me dirá, que no aguanta el encierro, que no tiene qué comer, que añora ir a la iglesia, a la escuela, al trabajo, que no puede estar sin ir al salón a tapar lo que todos sabemos tiene ( canas), que tu familia y amigos te hacen falta; que tenía previsto una series de actividades como: ir de viaje,  celebrar cumpleaños familiares, fiestas entre amigos , cenas, bonches, en fin, lo que siempre hacemos, aparentar que estamos bien y “somos felices”.   
    Ahora yo te hago una sola pregunta ¿Antes de tu encierro valorabas todo lo que hoy añoras?
Si quieres volver a tener lo que tenías, espera  un poquito más y QUÉDATE EN CASA. Acércate a Dios,  Porque de seguro que cuando regreses a tu “vida normal”  será diferente.
Doris Rodríguez