lunes, 11 de noviembre de 2013

Si nos lleváramos de consejos

    


    Todos los días, aparece alguien que de una  u otra manera nos da un consejo, pocos le hacemos caso, y dejamos  que la realidad nos llegue cuando chocamos con la pared, y nos rompemos la nariz; solo los momentos de caída nos hacen levantarnos y buscar la fuerza y la sensatez, para aprender y asumir con entereza de los errores cometidos, de los fracasos y las  malas decisiones  tomadas en el transcurrir de nuestra existencia.  He aquí algunas sugerencias que nos  conducirán asumir la vida  de una manera diferente, y  ayudar a mejorar nuestra alma.

   *Evita criticar y descalificar a las demás personas, en especial a tus seres queridos. Cambia tu actitud y adopta el compromiso de reconocer y resaltar sus cualidades y características más positivas. Es preferible guardar silencio cuando no tenemos algo positivo o constructivo que decir acerca de una persona.

    *Nada sucede por casualidad, y todo lo que ocurre es para bien, cada experiencia trae su lección y cada situación de gozo o dolor es una oportunidad para aprender y crecer aunque en el momento no podamos reconocerlo.

     *Asume la responsabilidad de tu vida y decide aligerar el peso emocional de tu equipaje, para que puedas pasar la página, recuperar el ánimo y la confianza que te permitan tomar lo mejor de esa experiencia para crecer, madurar y sentirte mejor!

     *Evita darle vueltas en tu cabeza a las preocupaciones, pues así, solo lograras que se hagan más grandes y graves de lo que son. Réstale importancia a las situaciones  que no la tienen.

   *Aprende a diferenciar entre una situación importante y otra que no lo es. Recuerda que en la medida en que mantengas la serenidad y la confianza en ti mismo, podrás afrontar lo inesperado de una mejor manera.

   *Anímate a bajar las barreras, que te separan de los demás, para expresar espontáneamente tu forma de pensar y de ver la vida. Para tener una vida plena, es importante dejar el pasado atrás, especialmente si fue difícil.

  *Bien vale la pena, recordar, que solo a través de la resolución de algunos de esos recuerdos, es cómo podemos liberarnos de esa carga emocional negativa que seguimos guardando, y que lograrlo, nos hará libre del hábito de responder exageradamente a ciertas situaciones que estimulan nuestras reacciones más negativas.


   *Somos el producto de todo lo que hemos vivido, lo hayamos aprendido o no. Hagamos el esfuerzo de observarnos a nosotros, sin juicio y sin crítica, solo con el ánimo de conocer la conexión que existe entre nuestras reacciones, actitudes y comentarios, y los pensamientos, las ideas, los prejuicios y las creencias que pudieran estar alimentándolos.


La próxima vez, que una persona o una situación te haga sentir fuera de control, maneja tus emociones y tomate unos segundos antes de reaccionar, para pensar, buscar la causa de tu malestar dentro de ti, cerrar la puerta que te conecta con tu pasado, y responderle a la persona o a la vida de una manera completamente diferente. ¡Rompiendo el Ciclo que has repetido durante tanto tiempo!


   * Encuentra con quien compartir tus momentos de placer, ¿No disfrutas más de un atardecer con tu pareja o de una película divertida con tus hijos? Evita sacrificar siempre tus deseos para complacer a los demás, de vez en cuando exprésalos abiertamente y busca la manera de satisfacerlos.


     *Asume el compromiso de cambiar. Solo tú puedes hacer algo concreto para dejar de reaccionar cuando te sientes afectado emocionalmente, repitiendo una y otra  vez los mismos pensamientos, actitudes y comportamientos. Haz una lista de propósitos personales y cumple cada uno de ellos. Recuerda que el más beneficiado vas con el cambio, vas a ser tu mismo.

   *Si  tienes la capacidad de recuperar la serenidad, el valor, la fortaleza y la claridad que necesitas para superar la dificultad y hacerlas parte de tu desarrollo personal, sería   un logro maravilloso, a final de año es importante pasar balance y  ver que logramos a nivel espiritual, emocional.


sábado, 7 de septiembre de 2013

Escuchando el silencio del alma

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ƸӜƷ`*•.¸

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“La única huella que perdura, es la del camino  recorrido”.D.R

Cuantas veces nos preguntamos, de dónde aprendimos tal o cual conocimiento, que nos aflora en determinado momento, sin darnos cuenta, cuándo, dónde y cómo lo aprendimos.
En el camino de la vida, vamos cargando nuestro ser de momentos buenos y otros  no  tan buenos, pero de ellos,  vamos llenando la existencia de silencios y ruidos. Cada momento es un aprendizaje, y sin darnos cuenta llegamos a un estado que nos indica que debemos hacer un alto y escuchar el silencio de nuestra alma, porque allí nos encontraremos con respuestas que dan Luz a nuestra existencia. 
Pero no somos conscientes de esa Luz, de nuestro origen y nos enredamos en los laberintos de la personalidad. La búsqueda espiritual es la búsqueda de nuestra conciencia, de nuestra divinidad interior. Y es que todos queremos ser feliz. Si la felicidad nos la da un objeto o persona externa, nos volvemos dependientes, y la dependencia nos hace perder  el horizonte, la libertad.
Debemos ir en búsqueda del espacio interior que genera nuestro estado de felicidad, conectar con lo divino. Debemos incluso enfrentarnos  con todas las experiencias del pasado que han dejado cicatrices y huellas emocionales.
Es por ello que debemos recurrir a sanar nuestro estado interior, es importante buscar del antídoto, que sane nuestros patrones negativos, y podemos conseguirlo con  la meditación.
No es que sea una receta  extraordinaria,pero sino valoramos  nuestros  caminos  individuales, los diferentes grados evolutivos de cada ser; no lograremos llegar a escuchar el silencio del alma . La meditación nos indica el camino.
Todo lo  que buscamos  ya lo poseemos, pero no nos damos cuenta que está allí. No hay formulas exactas en esta búsqueda, cada camino es una aventura individual, pero tratemos de encaminarnos hacia el alma.





jueves, 1 de agosto de 2013

¿Queremos recuperar el niño interior?

“Tu niño interior está hoy a flor de piel” Siendo muy joven ,tal vez niña, escuche esta frase y me quede pensando, que significaba, a quien se lo decía era adulto, pero ese día, efectivamente parecía un niño juguetón, alegre y travieso .Como siempre me ha gustado conocer el comportamiento del ser humano, es la única manera de comprenderlo y amarlo con sus defectos y virtudes, pero sobre todo, ayudarle  hasta donde me sea posible. Con  mucha frecuencia leo sobre temas de psicología, crecimiento personal y espiritual, que me ayudan día a  día para vivir en un mundo armónico y ofrecer  mi espacio  donde sea más fácil habitar. 
Así que hoy me voy a atrever a refrescar  mi memoria con  lo leído y aprendido, quizá no salgan citas textualmente de sus autores, pero así fue quedando en mi memoria ,lo del niño interior que todos en algún momento de nuestras vidas sacamos.
Ya que el  “Niño Interior” está formado por  las experiencias de los primeros años de infancia y por las diferentes vivencias en las etapas de la vida. Lo más seguro es que hayan existido experiencias negativas, fuertes traumas emocionales que hicieron sufrir a ese niño o niña, por ejemplo la falta de amor de uno o ambos padres, el maltrato, un desprecio, algo que te lastimó o te produjo mucho temor, en fin, son muchos los motivos .
 El niño interior es el Yo que realmente somos, que siempre hemos sido, que habita en nosotros aquí y ahora. El Yo que nos conecta con la alegría y con la tristeza de nuestra infancia, es precisamente la clave para alcanzar la plenitud en tanto adultos. Parar recuperar ese niño interior que todos llevamos dentro, hay que  hacer  que aflore toda la sabiduría que el “niño” puede aportar a la conciencia adulta.
Todo esto aparentemente olvidado, está allí y de manera inconsciente influye en el comportamiento a todo nivel hasta el punto de producir efectos negativos que no comprendes en la actualidad.

El hecho de no tener suerte en tu carrera, en el amor, el tener inseguridad personal, baja autoestima, relaciones interpersonales conflictivas o un temor inexplicable son frutos de un Niño Interior enfermo.

Al sanar nuestro Niño Interior muchas veces desaparecen las partes negativas de nuestra personalidad y es mucho más fácil alcanzar el éxito y la felicidad en todos los niveles de la vida, de ahí la importancia de esta sanación.
Es probable que consigamos recuperar nuestro niño interior y ser feliz.

Si logramos sanar  al niño interior herido o maltratado, resolver antiguos traumas, recuperando la inocencia,  la alegría y la capacidad de asombro, asumir al niño como símbolo de nuestra energía creativa, perdonar nuestros padres, desarrollar una conciencia compasiva, resolver los cabos sueltos que nos quedaron en nuestra niñez, que quedaron en el camino, entonces es probable que tengamos una vida más ligera y podamos al final encontrar la paz interior.

Y lo podemos lograr ¿cómo? es importante respirar y recordar por un momento las cosas que te hacían feliz en la infancia, y ponerlas en práctica, con frecuencia los adultos olvidamos los momentos  sencillos de la vida  y nos enfocamos a los grandes logros…Si retrotraemos  el niño interior,  este nos ayudaría de manera simple a  recordar algunos placeres infantiles, que nos devuelven la sonrisa y la sensación de bienestar. Pongámoslo a prueba, reúnanse en familia, con sus hermanos, con algún amigo o vecino de la niñez y notaran cuantas  simples acciones hechas en la niñez producirán las más agradables carcajadas y dejamos el mal humor atrás.

Algunos especialistas consideran que el mal humor desaparecerá, si dejas tus actividades diarias por un momento, para disfrutar de una paleta que recuerde tu niñez, ver los niños jugando  o simplemente dibujar, leer o  escribir de lo que te guste.

Para los infantes no existen las preocupaciones, porque ellos ven la vida como un juego y no como un enfrentamiento, así que no lo dudemos y recuperemos a ese niño interior; tratando de ver la vida de forma positiva, para perder el temor, la frustración y el enojo.

 Para consentir  a tu niño interior regresa el tiempo: visita un parque, haz burbujas,   comparte los juegos con tus hijos, sobrinos o nietos,  ríete de lo más sencillo de la vida; disfruta y convive contigo mismo. 

Sé que la pregunta ahora será, ¿Cómo sano mi niño interior, Cómo lo curo?  Ademas de  todo lo anterior  y aunque muchos no consideren  importante y efectivo, es importante confiar en la ciencia, es por ello que, para lograr reconciliación con nuestro Niño Interior y sanarlo debemos entrar en contacto con él o ella (los psicólogos denomina a éste proceso “Regresión”).
El Maestro, Jesús de Nazaret, se refería a esto cuando dijo: “Tienen que ser como niños”. Él no quería decir que fuéramos ingenuos o inocentes como un niño, sino saber cómo volver a ser ese niño que fuiste en el pasado y sanarlo. Jesús sabia que en el fondo de nuestro pasado estaban las cosas que afectaban la conducta de las personas.

Los pasos para sanar nuestro niño interior son los siguientes:
1.   En tu habitación, cómodo, acostado o sentado, te relajas, cierras los ojos, respiras profundamente. Concéntrate en tu respiración y comienza lentamente a contar de forma descendente de diez a cero.
2.   A medida que avanza la cuenta te irás relajando más y más, visualízate a ti mismo(a) llegando al centro de tu mismo ser, ves una luz y en medio de ella visualiza como va apareciendo tu niño o tu niña interior.

3.   Sin perder tu relajación y concentración mírala, obsérvala, ¿Cómo  lo ves? Pequeño, sólo, abandonado, maltratado, asustado, llorando, desorientado, o tal vez feliz, solo tú sabes cómo ves tu niño interior.
4.   Trata de visualizarlo claramente, en un principio tal vez no lo logres, pero trata en todo lo posible de hacerlo ya que de este ejercicio depende gran parte el éxito en tu vida.
5.   Acércate a él o a ella, háblale suavemente, con mucho amor. Abrázale, si deseas cárgale, dile que le amas, que ya no está sólo, que ya no sufrirá mas, que todo ha pasado y ya nadie le hará daño. Trátale con mucho amor y consuelo. Ahora que has entrado en contacto con ese niño interior déjale saber que ya está sano que ya nada le molestará.
6.   Una vez logres contactar  tu niño interior míralo(a) lleno de felicidad, con amor despídete y dile que ya todo estará bien. Comienza a contar de 0 a 10 lentamente a medida que vas volviendo a tu realidad, abre los ojos lentamente y disfruta de la paz interior que sientes en ese momento.
A partir de este instante has sanado tu niño interior y estás listo para seguir adelante. Ya no te molestaran los traumas que inconscientemente te venían afectando y no te permitían alcanzar tu felicidad.
Ahora estás listo para el siguiente paso hacia tu superación personal y convertirte en un ser poderoso, capaz de lograr todas sus metas, alcanzar el éxito y ser completamente feliz. Ese siguiente paso es entrar en contacto con Tu Yo Superior.

 Gracias a:
Los diferentes artículos y libros sobre el tema, que han aportado a mi vida,como:  Lorena RamírezMarion Woodman, Joseph Campbell, , June Singer, Ralph Metzner, Marie-Louise von Franz, Erik Erikson y Jeremiah Abrams
Pero sobre todo  a una historia que encontré de una chica que cuenta su vida, los abusos sexuales que vivió, el abuso de drogas, las peleas, las situaciones extremas y como cambió su vida al darse cuenta que tenía que sanar a su niño interior. Estos casos me sirvieron de plataforma para escribir este artículo que comparto con ustedes




jueves, 11 de julio de 2013

¿Cómo evaluamos la vida?



Nos pasan los años y cuando llegamos a cierta edad nos detenemos a evaluar la vida, a sumar años, hacer recorridos en la historia memorial del tiempo.

 Esas evaluaciones la determinamos por la cantidad de actividades  en la que hemos participado, los reconocimientos recibidos, por los títulos universitarios que hemos obtenidos y colgamos en la paredes de la casa u oficina.

La vida la medimos por el número de amigos que tenemos o conocidos influyentes en el gobierno de turno, otras veces la evaluamos de acuerdo a la manera que somos aceptados por los demás, en el entorno donde nos desenvolvemos.

 Evaluamos nuestra vida por los resultados financieros de fin de año, o por la membrecía del club X, por los lujos que exhibimos , los lugares que frecuentamos ,los viajes que hacemos, las boutique donde compramos nuestra ropa, la marca de los perfume que nos ponemos ,por  las carteras y zapatos  que usamos , que solo sirven  para  anotar  puntos, como si se tratara de  un juego… vivimos y medimos la vida  por  competencia,  por aparentar lo que en realidad nos falta, y hacemos creer que somos de  una clase social a la que no pertenecemos.
 
No sigamos midiendo la vida por los éxitos o la fama, ni por  la cuenta bancaria que tenemos, porqué muchas veces debemos preguntar cómo lo ganamos, no valoremos la vida por la profesión, cuántos analfabetos tienen ideas más brillantes que aquellos que fuimos a la universidad, no evaluemos la vida,  por el lugar donde estudiamos o donde trabajamos. Hay trabajos más digno que el nuestro.
 
No podemos medir la vida  por la casa donde vivimos, tal vez solo la habitamos o por la marca del auto que tenemos, es probable que no sepamos conducirlo.

              Si pudiéramos evaluar la vida:
Por los retos asumidos
Por la entrega y el amor  en lo que hacemos         
Por el entusiasmo puesto en el  trabajo
Por la confianza  ganada
Por la luz que irradiamos
Por la alegría  transmitida 
Por la honestidad  exhibida 
Por la inteligencia sumada
Por el respeto obtenido
Por los sueños compartido
Por las oportunidades brindadas
Por la superación humana y la estabilidad emocional.
  
Si aprendiéramos  a vivir la vida, al final,  es posible que no tengamos que medirla, porque mas allá de medirla, es ver los resultados, no por lo que recibimos, sino por lo que pudimos haber dado.  

Porque la vida, si tiene una medida, deberíamos medirla por la equidad entre los seres humanos ,la ética, la honestidad, y el respeto por lo que hacemos, que sería el resultado de lo que somos, pero sobre todo, por  lo que sembramos en el camino,
 para alimentar el corazón de los demás.

La vida es un privilegio, disfrutarla  es una gracia, vivirla es una bendición, compartirla es un honor.








jueves, 4 de julio de 2013

¿Qué son los instintos?

 Según  los expertos, el instinto es una disposición psícofísica innata, heredada, que incita al sujeto a actuar de una determinada forma frente a un estímulo o un objeto.

 La conducta animal se desarrolla básicamente en función de los instintos, de forma automática y sin que el sujeto tenga conciencia de ello.

Mientras que en la conducta humana persisten un gran número de patrones instintivos, aunque, por su capacidad de racionalización, gran parte de la vida instintiva del ser humano ha sufrido un proceso de complejidad, mezclándose auténticos instintos con conductas voluntarias.

Generalmente, en el ser humano el impulso instintivo pasa por el “filtro” de la razón, por lo que, voluntariamente, es capaz de modificar, anular o reprimir la conducta instintiva. Esto es fácil de observar si comparamos la actitud de un niño pequeño con la de un adulto: el primero se moverá siguiendo únicamente sus apetencias, sin control, mientras que el segundo valorará sí es o no el momento adecuado para satisfacerlas. Pero este control es fruto de un aprendizaje y una educación que, en cierto modo, regulan los instintos. Es decir, se aprende a controlar los instintos, pero no la conducta instintiva en sí, que es innata.

Según la complejidad y desarrollo intelectual del ser humano, podemos clasificar los instintos de la siguiente manera: el de conservación, vital o de supervivencia, el social y el sexual o de placer. Siempre habrá uno que predomina, otro que apoya al dominante y un tercero que tenemos olvidado o descuidado.

Si logra reconocer cuál es tu instinto predominante y cuál el de apoyo, si te reconoces en alguna descripción puede ayudarte a cultivar el instinto que tienes abandonado y moderar e impulsar los otros para mejorar las relaciones y bienestar.

De acuerdo con el Eneagrama y los estudios de Rizzo y Hudson, estos impulsos son tan rápidos y primarios que casi no nos damos cuenta de ellos. Definen nuestros gustos, nuestra forma de ser, actuar, vivir y convivir y explican por qué somos diferentes a los que nos rodean.

Aquí, una breve descripción del carácter general de las personas con cada instinto: Conservación, vital o de supervivencia. Quienes tienen más desarrollado este instinto sienten un impulso por buscar la supervivencia, el bienestar y las cosas esenciales de la vida.

Si prima el instinto de conservación, mi foco de atención estará en mi ser, mi cuerpo, mi mundo. Busco seguridad, protección, comida, casa, confort y recursos materiales. Puedo llegar a comprar provisiones para un mes y pienso en términos de “tengo que estar preparado para cualquier imprevisto”.

Mi deseo básico es crear un nido, una plataforma que me haga sentir seguro: “¿Hay suficiente comida en el refrigerador? ¿Tengo un seguro de vida para alguna emergencia? ¿Cómo está mi salud?”Ya que gran parte de mi atención está en mí, me pregunto qué tan confortable me siento y cuáles son las necesidades físicas inmediatas de mi cuerpo, si tengo hambre, frío, calor o si estoy cansado o me molesta el aire acondicionado, por ejemplo.

Social. Las personas que tienen más desarrollado este instinto sienten el impulso de buscar a otros, a grupos, a comunidades, de manera similar a los animales que tienden a agruparse en manadas en donde se sienten seguros y protegidos.
Si soy social, mi foco de atención está en mi círculo de amigos, en el grupo, en el mundo, en lo que pasa afuera, en las redes sociales. Mi deseo principal es ver por otros y pertenecer a ciertos grupos. Necesito a las personas, necesito reconocimiento, popularidad, honor, estatus, posición social y aceptación. Me importa mucho dar una buena impresión.

Instinto Sexual. Las personas en las que este instinto es predominante, tienen el impulso de buscar intimidad, fusión, unión y conexión profunda con otra persona. Su fin último es la conservación de la especie.
Si soy sexual, mi foco de atención estará en el ser amado, en mis amigos íntimos, en lograr la afinidad, en la intensidad, en percibirme unido a esa fuerza que prende, estimula y me hace sentir vivo. Me estimulan un cuadro, una canción o un poema que me hagan vibrar.

Si bien es cierto que los antes mencionados  son los principales, tenemos además, el  instinto  cultural, instinto de lucha y huida, de nutrición, de guarida y búsqueda de calor.

Los instintos culturales. Más propios del ser humano culto y civilizado. Entre ellos  se destacan la “ambición” de saber, las inclinaciones artísticas, la investigación, las tendencias filosóficas y religiosas, etc.

Así, si en los animales los instintos constituyen el motor de su vida, en el ser humano éstos pasan a un segundo plano, situándose tras los actos voluntarios y conscientes.

¿Cuál es el instinto que predomina en ti y cuál es el de apoyo?







jueves, 27 de junio de 2013

¿Ahora qué vale?





En  República Dominicana, éramos criados con principios morales comunes.
 Recuerdo que en mi niñez, madres, padres, abuelos, tíos, maestros, vecinos eran personas dignas, de respeto, admiración y consideración, cuanto más edad o más viejos, más afectos nos dieron y más respeto existía.

Era mala educación e inimaginable responder mal a los mayores, maestros o autoridades, nunca un Tú. Había respeto. Confiábamos en los adultos, porque todos eran padres, madres o familiares de todos los niños/as  del barrio, del campo, del pueblo o en la gran ciudad. Era amor por el ser humano .Teníamos miedo apenas de los sapos, ratones, culebras, o la oscuridad de la noche.

Sin embargo, hoy temo, por todo lo que mis hijas y nietos vivirán.
Por el miedo en la mirada de los niños, jóvenes, ancianos y adultos, porque ya no tienen en que y en quién confiar.

Porque hoy ser honesto es de tontos, pendejos .No tomar ventaja es ser necio…No comprar lo que nos ofrece el mercado es desfasado.

¿Qué pasó con nosotros?. ¿Dónde  y cuando nos perdimos en  este libre  mercado? 

Los derechos humanos  ya no existen. Hoy  conocemos de deberes ilimitados para ciudadanos "honestos", "honorables"Ahora pasan tantas situaciones. Profesores maltratados y maltratando  en las aulas, niños sirviendo de  mulas en las esquinas, amenazados por traficantes, nuestras casa parecen cárceles, con rejas en las ventanas y puertas.

  Las armas de fuego parecen  juegos de entretenimiento, los abortos se practican hasta en las escuelas, las drogas son consumida como golosinas   .Robos, asaltos y violaciones  ya nos es cuestión de un  típico hombre de clase baja sin educación. Ahora nadie es de fiar, de quien menos esperamos nos puede violar.

Lo increíble, es que ninguna de estas situaciones parece importar 
La mayoría sólo piensa en cómo conseguir más dinero. Cada uno  está encerrado en su mundo. No les preocupa el bienestar común, ni lo que les pasa  a los demás. 

Hoy la honorabilidad de un hombre se mide por la cantidad de ceros a la derecha que tenga su cuenta bancaria. Hoy tenemos autos que valen más que abrazos. Hijos queriendo regalos por pasar de curso o hacer sus tareas cotidianas,   ya no piden  un carrito, o un juego de YA , ahora  quieren celulares último modelo  en  sus mochilas .Niñas de 5 años pintándose los labios, las uñas y queriendo estar en el salón de belleza, porque ya no aceptan tener "pajón" 

¿Ahora qué vale?
Ahora vale más una laptop que un diploma. Vale más una pantalla plana que una conversación. Ahora vale más un caro rubor que una flor. Ahora vale más una prebenda que un abrazo,  una propina a una sonrisa Ahora vale más parecer que ser…!

Pero hoy solo quiero  escuchar  la palabra Dios en la voz de los niños
Hoy quiero la honestidad como motivo de orgullo. La rectitud de carácter. Miradas limpias a los ojos. Hoy quiero tirar las rejas de mi ventana para tocar las flores. Hoy quiero sentarme en la vereda y tener la puerta abierta en las noches de verano. Hoy quiero confiar en que existe la verdadera amistad. Hoy quiero la vergüenza y la solidaridad. Hoy quiero la fe, la esperanza, la lealtad   y la confianza.
Hoy quiero el retorno de la verdadera vida, simple como la luna, limpia como un cielo de abril, leve como la brisa de la mañana y suave como la lluvia. Hoy quiero un mundo tranquilo donde puedas observar las estrellas en medio de la noche sin  temor a que me asalten. Hoy quiero un mundo simple y común donde se ame.

Hoy siento una tristeza infinita, por todo lo que hemos perdido. La nostalgia se apodera de mi ser .Cómo sueño con aquella realidad que quedo atrás! porque hoy quiero volver a soñar para sonreír y no llorar. 



miércoles, 26 de junio de 2013

¿Qué dice tu Voz?




Si definimos de manera correcta que es la voz podríamos encontrar en cualquier lugar esta simple definición. Voz: es un vocablo que permite dar nombre al sonido que se produce con la vibración de las cuerdas vocales, mediante el aire que es expulsado por los pulmones y que sale por la laringe.
En realidad nos hemos preguntado ¿cuán importante es nuestra voz  y que dice ella de nosotros?

Podría parecer exagerado, sin embargo, escuchar la voz es una experiencia neurobiológica. Creo que todos alguna vez nos hemos sentido atraídos por una voz o la hemos  rechazado de plano. La gente  reacciona visceralmente  al sonido, nos gusta o no nos gusta. Lo toleramos o no.


La voz afecta la forma en la que percibimos a una persona, y por ella asumimos características de su personalidad. Por ejemplo, quien  tienen una voz resonante y profunda son percibidos  como más inteligente, populares, exitosos, y son más recomendables  para salir o casarse con ellos según expertos. La persona de voz aguda, da la impresión de ser nerviosas, inseguras, ligeramente emocionales o, incluso, histéricas.

Cuando una persona tiene defecto en el habla ; por ejemplo cuando una mujer  pronuncia la “s “por “z” puede ser percibida  como mona, aunque se le juzga como menos inteligente  y menos competitiva  que quienes no cecean.

Aquellos que tiene tono de voz muy fuerte son percibidos  como protagónicos  y son menos agradables  que aquellos que tienen un tono de voz más suave .

Así como un análisis puede revelar un padecimiento,  el tono de la voz de las persona puede revelar  lo que le está sucediendo psicológicamente. Eduardo Galeano decía que el “tono de la Voz  es el espejo del alma “ es cierto el tono de la voz está íntimamente ligado con áreas del cerebro que se involucran con la emoción, es difícil esconder  cuando nos sentimos desesperados,contentos,enojados,frustrados o felices , naturalmente se logra , sobre todo cuando se tiene que trabajar con la voz  es necesario estar consciente que debe  asumiese  con profesionalismo para evitar ser juzgado por nuestros oyentes .
  
La voz es un indicador  de cómo nos sentimos con nosotros mismos y con el mundo que nos rodea .Todo lo que pasa por  nuestra cabeza o lo que pasa por el corazón, por lo general se manifiesta vocalmente .Sin embargo tendemos a fijarnos más en las palabras  que en el tono,  por la simple razón que las palabras  requieren una repuesta racional. Aun  así hoy si pudiéramos en una conversación  bajarle el volúmen al contenido y elevarselo al tono encontraríamos algunas sutilezas que podrían ayudarnos a mejorar algunos canales  de comunicación.

Si analizamos la voz de acuerdo a los expertos en imagen la voz se divide en cuatro grandes categorías:
1.  Tono: alto o bajo.
2.  Volumen: bajo, fuerte o que se desvanece al final.
3.  Calidad: grave, rasposa, nasal, con gemido, resoplona o agresiva.
4.  Estilo: agitado, demasiado rápido aburrido y plano, dulce, sexy o coqueto, demasiado lento, bien modulado, rico o entusiasta.

Demasiado alto. Los hombres o mujeres que hablan en un tono demasiado alto y agudo, voz de pito, por lo general no son tomados en serio.  Se les cataloga como personas inseguras, débiles, indecisas, inmaduras y se dice que no están en contacto con su sexualidad, porque cuando una persona se excita sexualmente, baja el tono de su voz; entones, quien habla constantemente en tono alto, puede estar negando o bloqueando su sexualidad.

Demasiado bajo. En general, esta voz es más estética y se deja de escuchar con mayor facilidad. Sin embargo, cuando la voz es muy grave, suena artificial y la persona puede ser percibida como payasa o pretenciosa. Esto suele suceder entre hombres en un tono bajo, la gente los tratará con mayor respeto.

Voz profunda sonora, entusiasta y rica. Una voz que proyecta los tonos adecuados, lo dice todo.
Quien la posee, expresa sofisticación, sensualidad y seguridad emocional. Esta voz pausas, varía en timbre, volumen y tono. Las personas con esta voz hablan con la mente y con el corazón. Parecen controlar sus vidas, por eso nos gusta escucharlas.
Voz deliberadamente sexy. Cuando la gente usa una voz cadenciosa resoplona y sexy, ten la seguridad de que se trata de un juego de manipulación.
Por lo general, estos seductores tienen un gran ego y sienten que pueden usar a otros en su beneficio.
Quienes tienen este tipo de voz, se perciben como confiables y es decepcionante escucharlos hablar con otros de manera normal.
Voz demasiado dulce. Hay quien es tan dulce al hablar, que canterrea con palabras melosas y tonos tan suaves, que uno casi puede entrar en un shockdiabético al escucharlos. Aunque  se perciben muy amables, lo cual cumple con su intensión, es difícil confiar en alguien que siempre suena tan dulce.
Voz plana y sin vida. “La música es más que sonidos organizados”quienes hablan de esta manera son percibidas como apáticas, distantes, apretadas o reprimidas.

Muy bajito, si no es por un problema de salud, quienes tienen por costumbre hablar quedito, suelen hacerlo para llamar la atención. En el fondo, les gusta que la gente les pida repetir las cosas y lo usan como un juego de poder.

Muy alto, los que hablan gritando, tono que se usa típicamente en los gimnasios, lo que hacen para llamar la atención. Por lo general, quienes hablan así se proyectan como personas pomposas, arrogantes, socialmente torpes, controladoras, bravuconas y competitivas.

La calidad de la voz
Voz temblorosa. Quien tiene este tipo de voz, por lo general está alterada y nerviosa. Se preocupa mucho por cómo la va a percibir la gente y por ser aceptadas. Son personas temerosas y tienden a ser neuróticas e incapaces de manejar las tensiones.

Voz agresiva, La gente que ataca con su tono de Voz es de carácter fuerte, aparenta estar enojada, es muy competitiva y agresiva.
Incluso, salpican una simple conversación con repentinos brotes de hostilidad que suelen ser un congruente con el tema que se discute.
Voz nasal.  Quien tiene este tipo de voz, como el de la Niñera, rara vez es tomado en serio. Con frecuencia son injustamente juzgados como poco inteligentes. La cualidad crispante de su voz hace que suenen insatisfechos.
¿Le ha pasado que al conocer a una persona sientes que hay algo en él o en ella que te desagrada? No sabes bien qué es lo que te molesta; no obstante;, cuando lo piensas, te das cuenta de que es su manera de hablar. El Psicólogo Estadounidense Gallup autor de estudios sobre imagen y personalidad, realizó una encuesta en Estados Unidos que representa a todas las edades, niveles socioeconómicos y educación. A los encuestados se les preguntó cuáles eran los diez hábitos de habla que más le disgustaba escuchar de una persona. Y estos fueron  los resultados.
1.  Interrumpir mientras otros hablan.
2.  Maldecir o usar groserías.
3.  Muemurear o hablar muy bajito.
4.  Hablar en un tono muy alto.
5.  Usar una voz monótona.
6.  Usar muletillas tipo ummmm, esteee,  eeeeh, tú sabes, ¿no?.
7.  Un tono nasal.
8.  Hablar muy rápido.
9.  Pobreza de lenguaje o mala pronunciación de palabras.
10.   Un tono de voz aguda.

Todos podemos modificar el tono de voz, si desea puedes grabarte hablando  y escucharte .Muchas veces somos los últimos en notar  nuestros tipo de voz, incluso al principio te puede parecer desagradable. Debo admitir que pasaron muchos años para aceptar mi voz a pesar de que innumerable oyentes insistían en que tenía una  voz agradable.
Quizá si escucháramos nuestra voz interior,  pudiéramos moldear más fácil nuestra voz sonora.