miércoles, 6 de abril de 2022

Enseñar es aprender.

Gestos que te quitan poder.

    Quizás piensas que no te tienen en cuenta, que no te respetan o que ni siquiera te ven, a pesar de que te esfuerzas, eres educado, hace bien tu trabajo, eres una buena persona y tienes muchas mas virtudes, pero, aunque sea injusto, los demás nos tratan según como nos perciben, y nosotros mismos, sin quererlo adicionamos las reacciones de los demás.

      Si nos ven demasiado discretos, débiles e inseguros estamos favoreciendo que alguien se pueda aprovechar de nosotros o que tenga mas opciones de ganar en una situación donde estamos compitiendo.

  Por eso hoy, tratare algunos aspectos de tu comunicación no verbal, que puedes cambiar para proyectar una imagen más firme, segura y carismática.

Veamos algunos hábitos no verbales que tienes que tener en cuenta.

1-Ocupar sitios poco visibles, situarte en los rincones, en los extremos, en las ultimas filas o en el asiento más bajo.

2-Reducir tu cuerpo buscando que tengas menos volumen, tanto sentado como de pie.

3- Protegerte con algún documento, carpeta o incluso un abrigo y hacerte menos presente.

4- Hundir la cabeza entre los hombros, bajarla o ladearla.

5- Enrollarte en una bufanda o abrigo y desaparecer detrás de esas indumentarias te hacen invisibles.

6- Mantener los pies juntos cuando estas de pie o mover constantemente las piernas demuestras ansiedad e inseguridad.

7-Hablar con las manos caídas o gesticular con poca energía y las muñecas blandas.

8- Tocarte la frente o jugar con el pelo.

9- Jugar con objetos o tener movimientos nerviosos en las manos o los brazos, no mantener el contacto visual y bajar la mirada.

10-Sonreir, pero de manera forzada y permanente por compromiso, por timidez o por nerviosismo.

 Todos estos consejos sirven para hombres y mujeres, pero especial atención a mujeres, porque nuestro lenguaje corporal ha sido entrenado para la discreción, la seducción, la amabilidad y al transmitir estas en teorías virtudes, muchas veces, proyectamos una imagen de inseguridad o de docilidad, que probablemente no es cierta, y además no nos interesa.

Es momento de analizar los gestos que te pueden perjudicar en determinadas situaciones.