domingo, 28 de abril de 2019

Adecentemos el ejercicio de comunicar.


  
       Siento una gran tristeza, ver cómo hemos ido perdiendo la objetividad, sobre todo el valor humano, esa nobleza que debe tener un comunicador y la inteligencia de valorar con sano juicio los acontecimientos, diciendo lo que tiene que decir y hacerlo bajo los criterios de la ética y sobre la base de una producción con un guión previamente elaborado.
    Ya no sólo transmitimos las notas manchadas de sangre irrespetando las víctimas y sus familiares, sino que solo nos interesa obtener el mayor número de televidentes, oyentes o like en las redes sociales; además estamos cayendo en las bajezas más grandes con el propósito de conseguir unos centavos con las actuales autoridades, candidatos y empresarios. ¡QUE LÁSTIMA! si supieran que el dinero va y viene a través del trabajo digno, mientras que el deber, la empatía, el defender a los más vulnerables con equidad es lo que vale en un comunicador  ¡POR DIOS! hagamos un ejercicio elemental. Conversemos con nuestra conciencia que de seguro ella nos dirá qué estamos haciendo mal y qué estamos haciendo bien .
    Atención autoridades, deben adecentar los medios , así como no todo el mundo está acto para portar una arma de fuego , no todos estamos preparados mental y emocionalmente para tener un micrófono y una cámara frente a nosotros, creo que es necesario que la Comisión de Espectáculos Públicos y Radiofonía dé una revisión a quienes están haciendo uso del micrófono. Los oyentes y televidentes merecen respeto, si por algún lado queremos ayudar a que ésta sociedad no termine de caer en el abismo… ES URGENTE, un alto en el camino que nos conduzca a un cambio al comunicar en nuestro país.
  Los medios de comunicación no están para exhibicionismo, para alcanzar popularidad u obtener dinero, los medios están para entretener de manera  sana, informar con veracidad sin inventos, ir al lugar de los hechos, investigar y luego ofrecer la información, no podemos seguir dañando la mente de los niños, quitándoles la paz a los adultos y acabando con la tranquilidad de un pueblo. Abracemos con respeto y criterios éticos esta profesión que tenemos el privilegio de ejercer, pero de manera digna, recuerden somos responsables de transmitir no solo conocimientos, información y entretenimiento, sino también de llevar tranquilidad a la población .Si no sabemos comunicar de manera correcta hacemos más daño que una bomba atómica. Todos nos hemos creído con la capacidad de decir y hacer lo primero que nos llegue a la mente sin antes pensar en las consecuencias.
   Mientras tomamos consciencia, iniciemos una nueva búsqueda de comunicar. OREMOS, ENCARECIDAMENTE POR TODOS Y PARA TODOS.